Dossier

Cuatro narradores jaliscienses: Arreola, Azuela, Rulfo, Yáñez

 

 
 

 

Presentación

Cecilia Eudave

 

Introducir a los nuevos lectores en la literatura mexicana de la primera mitad del siglo XX se ha convertido, para algunos estudiosos y amantes de la lectura, en una consigna fundamental en este incipiente siglo XXI. No sólo porque a ellos les debemos un cambio en el paradigma del canon tradicional de esa época, el caso de Juan Rulfo con su novela Pedro Páramo o de Juan José Arreola, cosmopolita, vanguardista, ambos innovadores en la conformación de una narrativa moderna más acorde a los nuevos tiempos; o en su defecto a Mariano Azuela y a Agustín Yáñez narradores de las costumbres, el lenguaje y formas de vida de México, que evidenciaron los cambios surgidos de una fallida revolución, aportando una lectura rica en conflictos políticos, religiosos y culturales. No, no sólo por eso, sino por la calidad indiscutible de la puesta en escena de la sociedad que les tocó vivir, ofreciendo al lector múltiples posibilidades de lectura a nivel estético, biográfico, simbólico, discursivo o ideológico.

Partiendo de la relevancia de estos autores jaliscienses en la configuración de las letras nacionales, es grato encontrar a noveles investigadores, críticos y analistas que vuelven a ellos con ópticas renovadas, ofreciendo lecturas precisas, minuciosas e irreverentes con el fin de acercar no sólo a los especialistas sino a un público mayor. Público que disfrutará de estos acercamientos plurales, con estilos diferentes, frescos y propositivos. Aproximaciones personales girando en torno a la visión contemporánea de un legado literario que debe conservarse, transmitirse, para revitalizar ese pasado cultural que ha forjado lo que somos.

Así Juan E. Chávez Trava nos acerca a la obra de Agustín Yáñez desde la semblanza pormenorizada, en travesía fundamental, para reconocer la vitalidad de un escritor que marcó a su generación con su prosa decantada, comprometida con el lenguaje. Por su parte, Alejandro Piña, aborda, desde una óptica diferente, la escritura de Mariano Azuela, entregándonos un ensayo que cuestiona nuestra perspectiva convencional del escritor de Los de abajo. En cambio, Bianca Eunice Castillo Villanueva, se avoca al Juan Rulfo nostálgico, cuya obra se deriva, principalmente, de la puesta en escena de dos discursos aparentemente opuestos: el del odio y el del amor, para convivir y entregarnos no sólo al hombre de letras, sino al otro Rulfo, el cotidiano. Finalmente, Ana Corvera, retomando el humor negro y la disposición al juego de Juan José Arreola, nos propone una serie de apuntes para leer a este escritor pionero de los ahora llamados géneros especulativos en el México contemporáneo.

Estoy segura que el lector de estos textos disfrutará de la variedad de enfoques, de la libertad discursiva con que los jóvenes investigadores se adentran en los universos creativos objeto de las propuestas aquí incluidas. Al final de su lectura quedará satisfecho, y sentirá más próximos a estos narradores jaliscienses que siguen despertando el asombro e inquietudes analíticas entre las nuevas generaciones.